Malas noticias para el tenis español. Mientras el ascenso de Carlos Alcaraz hacia ser uno de los mejores del mundo continúa, Rafa Nadal protagoniza la otra cara de la moneda. El tenista balear cayó ante el número 13 del mundo, el canadiense Denis Shapovalov, en el Masters 1.000 de Roma. La derrota no fue la única mala noticia para el español, pues se resintió de su lesión crónica en el pie izquierdo, lo que le perjudicó en el encuentro, a tan solo 10 días de su competición fetiche, Roland Garros.
"Hacia la mitad del segundo set sentí mucho dolor en el pie. No estoy lesionado, soy un jugador que vive con una lesión. No quiero quitarle nada a Shapovalov, jugó bien hoy, el mérito es suyo. Pero me era imposible jugar", señaló en rueda de prensa. La sorpresa de su eliminación fue mayúscula, pues el español ha ganado hasta en 10 ocasiones en Roma, pero la cojera y el dolor dejaron fuera del partido a Nadal.
"Veremos cómo va en los próximos días, en las próximas semanas. No es un momento fácil para mí", añadió el balear. Y es que esta lesión no es nada nuevo para Nadal, pues es una condición crónica que lleva mucho tiempo arrastrando en su pie izquierdo. El objetico del balear tras volver de la lesión en las costillas era afrontar los torneos de Madrid y Roma con solvencia para recuperar el físico y ritmo competitivo de cara al Grand Slam francés, pero las molestias en el pie fastidiaron los planes del tenista.
El español lo dio todo en el partido, ganando de manera muy holgada y sencilla en el primer set al canadiense, pero fue a partir del segundo set cuando las molestias volvieron a aparecer para el tenista balear. En un segundo set muy disputado que pudo llegar a ganar, el canadiense puso el empate y remató en un tercer set, con Nadal ya prácticamente cojeando, dando el resultado final de 3-1.
