El Real Madrid afrontaba el derbi madrileño ante el Getafe con un equipo con algunas bajas muy importantes como Fede Valverde o Vinicius Jr por Covid. El Getafe llenó el Colisseum por última vez hasta un largo tiempo, debido a las nuevas restricciones de aforo, para plantear un partido, muy poco vistoso, brusco, rozando en ocasiones lo poco deportivo (con muchas faltas, prsión intensa, muchas pérdidas de tiempo..), pero efectivo, ante un Madrid, que empezaba poniéndose la zancadilla a sí mismos.
Pues antes de el minuto 10 de partido, Militao regalaba el balón dentro del área a Enes Unal , que cruzó un disparo que rozó el pie de Courtois antes de entrar en la red. El Madrid no paraba de fallar pases y cometer muchas pérdidas tontas, parecía que no habían entrado en el partido y seguían comiendo las uvas. En una nueva pérdida, el Getafe pudo haber culminado la ventaja, pero el balón fue manso a las manos del meta belga merengue.
El Madrid comenzó a partir del minuto 15 hasta el final del partido su dominio por completo de la pelota, con un Getafe que jugaba con 11 hombres en su área y que ni siquiera intentaba salir a la contra tras despejar el balón. Primero fue Modric, quien hasta en dos ocasiones estuvo a punto de poner la igualada, pero el larguero y David Soria salvarían a los locales. Más tarde probaría suerte Toni Kroos tras una gran jugada coral que acabó con su disparo rozando la escuadra. En otro partido el Madrid ya iría ganando por 3 goles a 1, pero la suerte no le sonreía a los de Ancelotti.
El partido continuaba con el Madrid atacando, pero con cada vez menos ideas, desinflándose poco a poco de cara al final de la primera parte y concediendo algún acercamiento en el descuento a los de Quique Sánchez Flores. La segunda parte arrancaba con la salida de Hazard y Marcelo al campo para sumar una marcha más al ataque del Madrid. Un ataque malo, lleno de imperfecciones y lento, muy lento. La defensa del Getafe defendía con facilidad las intentonas de los blancos que, sin un Vinicius que sorprendiese encarando, carecía de ideas y se volvió predecible.
Con el partido acercándose al final, el Madrid se lanzó al ataque, y llegó una de las jugadas polémicas del encuentro, el colegiado no vió o ignoró el agarrón hacia Marcelo dentro del área del Getafe. El jugador blanco incrédulo se reía. El árbitro del encuentro permitió a lo largo del partido la brusquedad de los jugadores locales que con 20 faltas en todo el partido, más las no pitadas por las ley de la ventaja, siendo en total unas 30 aproximadamente, solo recibió 3 tarjetas amarillas, de las cuales una fue por perder tiempo.
El Madrid tuvo dos buenas ocasiones para empatar ambas desbaratadas por David Soria que fue el mejor de los locales. Primero se estiró para despejar el tiro de Casemiro que iba directo a la escuadra. La segunda, ya en el tiempo de descuento blocando el remate de cabeza de Isco, que entró en los instantes finales. El partido se dormía, con muchas pérdidas de tiempos de los locales que no querían dejar escapar su primera victoria del año. Pitido final y 3 puntos para el ultradefensivo Getafe de Quique Sánchez Flores que se aleja de los puestos de descenso.
Por su parte, el Madrid de Ancelotti demostró las carencias de un equipo, que cuando pierde la espontaneidad de Vinicius por banda o la magia de Benzema, que en el día de hoy estuvo en muy baja forma, se vuelve algo plano y predecible. Los blancos siguen líderes de la competición y deberán mejorar su imagen de cara a los enfrentamientos de Champions contra el PSG.