Ayer 17 de mayo, los Reyes Felipe VI y Letizia ofrecieron una cena de gala en honor del jeque Tamim bin Hamad Al Thani, emir del Estado de Catar, y la jequesa Jawaher bint Hamad bin Suhaim Al Thani, con motivo de su visita de Estado a España.
El mandatario ha sido agasajado con el collar de Isabel la Católica y la llave de la ciudad de Madrid. Y es que, Catar es la tercera reserva de gas natural del mundo y, conforme está el panorama energético, Zarzuela y Moncloa han querido obsequiar al emir con presentes volcándose con el recibimiento.
El emir, que ayer anunció una inversión de más de 5 mil millones de euros en España, tiene por delante estos dos próximas días reuniones con empresarios e inversores españoles incluido el presidente de Iberdrola, Ignacio Galán.
Todo ello a pesar de que, según la respetada organización Amnistía Internacional, Catar vulnera los derechos humanos. En el país se impera la tutela masculina y las relaciones homosexuales son delito.
De ello se ha hecho eco Pablo Echenique, portavoz de Unidas Podemos, criticando de "obscena" la gala ofrecida por Zarzuela: "¿en serio que es indispensable hacerle una obscena cena de gala y besarle el anillo a un teócrata multimillonario que masacra los derechos LGTBI y de las mujeres y explota trabajadores hasta la muerte para que Catar venda gas? ¿Qué pasa, que, si no, no te lo vende?" ha tweeteado.
