El operativo desplegado en el puente de Cerdedo-Cotobade desde el que cayó el pasado sábado un autobús de pasajeros ha logrado en la tarde de este martes sacar el vehículo del cauce del río e izarlo los 29 metros necesarios para alcanzar el viaducto.
Los medios estaban en la zona desde las 8.00 horas, cuando se cortó el tráfico en las inmediaciones del Puente de Pedre para hacer las pruebas de carga pertinentes y tratar después de recuperar el autobús.
Durante la mañana, los operarios y expertos vinculados al Ministerio de Transportes han instalado planchas a lo largo del viaducto para repartir la carga. A continuación, tuvieron lugar las pruebas de resistencia del puente que, según las fuentes consultadas por Europa Press, podría hundirse hasta 15 centímetros por la fuerza que implica el complicado operativo.
Los técnicos se descolgaron por una de las laderas para acceder al vehículo y lo aseguraron con cables y cadenas al pilar más próximo. Posteriormente, le pasaron varios cabos por debajo y comenzaron a izarlo, inicialmente con la parte delantera más elevada y, posteriormente, de forma pareja.
Aunque el proceso de izado ha sido rápido, todo el operativo ha estado salpicado de parones y reajustes técnicos, apremiado por la necesidad de subir el autobús al viaducto antes de la llegada de la noche. Tras terminar la operación, el autobús siniestrado ha sido colocado encima de un trailer para su transporte.
La bajada del caudal del río Lérez después del cese de las fuertes precipitaciones de la última semana ha facilitado el poner en marcha la operación. En todo caso, debía acelerarse antes de que las lluvias se reanuden el miércoles, previsiblemente.
Desde la mañana del lunes, bomberos y agentes de la Guardia Civil de Montaña han descendido en varias ocasiones hasta el autobús para realizar tareas de preparación de cara a la retirada del vehículo del río. Así, los profesionales han cortado árboles y han retirado partes de la carrocería del autobús para aligerar su peso y, asimismo, evitar que el agua se concentre en el interior del habitáculo.
Tras la retirada del vehículo, los expertos podrán iniciar ahora su análisis de cara a elaborar el atestado sobre el accidente. En la misma línea, este miércoles está prevista la llegada de un grupo de expertos de la Guardia Civil de Mérida --llamado Equipo de Reconstrucción de Accidentes de Tráfico (ERAT)-- para tratar de esclarecer lo sucedido.
ACCIDENTE EN NOCHEBUENA
El accidente tuvo lugar sobre las 21.20 horas de este sábado, Nochebuena, cuando un autobús de la empresa Monbus, de la línea regular entre Lugo y Vigo, se precipitó al río a la altura del kilómetro 67,5 de la N-541, en la parroquia de Pedre, en un puente a unos 35 metros de altura.
Dos de los fallecidos fueron rescatados la misma noche del suceso, con un fuerte temporal y a través de una 'línea de vida', dado que era muy difícil y peligroso llegar al autobús. Otras cuatro víctimas fueron localizadas durante la jornada del domingo y la séptima fallecida, el lunes.
Poco después del accidente, los servicios de emergencia rescataron con vida al conductor del autobús, que fue trasladado al Hospital Clínico de Santiago y ya ha sido dado de alta. El hombre dio negativo en los test de alcoholemia y de drogas. También fue rescatada con vida una mujer, que fue evacuada al Hospital Montecelo de Pontevedra.
Fue un conductor que pasó por la zona poco después del siniestro el que alertó en primer lugar al 112, al ver la barandilla del puente rota. Poco después, emergencias recibía también la llamada de alerta de la pasajera superviviente desde dentro del autobús, poniendo en marcha los medios de rescate.