Fad Juventud y BBVA, a través de un videotutorial, dan consejos a padres y madres sobre si es conveniente o no espiar las redes sociales de sus hijos y aclaran que si hay indicios de un peligro real donde la integridad del menor esté en peligro, "hay jurisprudencia favorable a este control en ejercicio de la patria potestad de padres y madres".
Esta guía responde a la pregunta sobre si los padres pueden espiar las redes sociales de sus hijos, ya que acompañar a los menores en el uso de las Tecnologías de la Relación, Información, Comunicación y Ocio (TRICO) "no es una tarea fácil".
Ante los riesgos para los menores como el sexting, ciberbullying o grooming y la preocupación que generan a las familias, este tutorial explica si espiar las redes sociales es la solución y lo mejor que pueden hacer los padres y madres.
El control de los teléfonos móviles de los menores se convierte en una cuestión controvertida, puesto que no existe una normativa específica que lo regule. En general, un padre o madre debe tener el consentimiento de su hijo o hija para acceder a sus dispositivos, aplicaciones y contenido. Son libres para administrar su uso, ya que se les reconoce el derecho a su intimidad, y al secreto de las comunicaciones.
No obstante, si hay indicios de un peligro real donde la integridad del menor esté en peligro, hay jurisprudencia favorable a este control en ejercicio de la patria potestad de padres y madres. Y, por supuesto, ante cualquier indicio de un posible acoso, extorsión, intimidación o chantaje, lo mejor que puedes hacer es pedir ayuda y acudir a profesionales, según aconseja la guía.
A pesar de ello, Fad Juventud y BBVA reflejan que "no es adecuado normalizar actitudes como la de espiar el móvil, ya que supone una quiebra de su confianza y es un mal síntoma de que no se ha conseguido tener una relación cercana para que nos puedan consultar dudas o problemas".
"Espiar su móvil no solucionará el problema, hay que tener en cuenta la importancia que otorgan a su privacidad e intimidad. Como padres y madres debemos respetar esto, pero también hacerles entender que su seguridad es lo más importante para nosotros", subrayan los expertos.
Así, inciden en que la clave es fomentar un acompañamiento que no sea intrusivo basado en una comunicación fluida que les oriente en su proceso de descubrimiento de las redes.
Para que la navegación de hijos e hijas por la red sea segura y, al mismo tiempo, los padres y madres sientan que tienen control sobre su protección, la guía propone a los progenitores que reflexionen sobre la relación que han construido con sus hijos, ya que una buena comunicación "contribuye a estimular la confianza mutua y facilitar que acudan a ellos si tienen un problema".
También aconseja que los padres y madres aprendan a escuchar a sus hijos "de forma tolerante y comprensiva", porque este clima de confianza propiciará que ante cualquier señal de alerta dejen revisar sus dispositivos si se lo piden con honestidad.
"Es importante que cuando se inicien en el uso de dispositivos lo hagan acompañados y en presencia de los adultos. De esta forma podremos orientarlos sobre los sitios web que pueden visitar.
Usa controles parentales y establece pautas claras de uso", añade.
Ya que el objetivo de los padres es el bienestar de sus hijos, deben entender que estos deseen pertenecer a un grupo virtual donde coincidir con sus amigos y amigas y compartir experiencias. "Es por eso que nuestros esfuerzos deben ir dirigidos a un acompañamiento en el uso de la tecnología fomentando la comunicación y la confianza", concluye la guía.