El jefe del Gobierno cántabro, Miguel Ángel Revilla, cree que él y sus homólogos autonómicos deben ir "todos a una" en la retirada de la mascarilla, que a su juicio hay que ir "jubilando", pero cuando digan los expertos.
"Esto ya a mí me tiene harto, y a la mayoría de la gente, pero habrá que quitarla cuando nos digan que quitarla no tiene ningún problema", ha considerado el líder del PRC, para rechazar así una "carrera entre presidentes autonómicos" para ver quién adopta una medida "más revolucionaria".
Con estas palabras, el regionalista ha respondido este martes a preguntas de los medios en Castro Urdiales acerca de la propuesta del presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, de suprimir el uso de las mascarillas en exteriores el próximo mes de julio, posibilidad que también estudia Madrid.
"Uno por quedar mejor va a decir: 'En Castilla no hay mascarilla; en Cantabria sí', pero si unos la llevan y otros no, nos mezclamos y entonces no tiene ningún sentido", ha advertido Revilla.
Ante esto, el jefe del PRC-PSOE ha recordado que su Ejecutivo "siempre se ha regido y se va regir" por las directrices del Consejo Interterritorial de Salud, que reúne semanalmente a la ministra y consejeros de Sanidad.
"Entendemos que ahí está el órgano de las personas expertas en la materia", ha manifestado Revilla, partidario de acatar lo que se diga en esa reunión y para que "vayamos todos en la misma línea". Y es que, a su juicio, asuntos como la retirada de la mascarilla no es algo sobre lo que pueda "opinar cualquiera que va por la playa".
Así, Cantabria hará lo que se apruebe en ese encuentro, aunque su presidente supone que en la medida en que se vaya reduciendo el número de contagios por un lado y vaya aumentando la vacunación por otro, habrá que "ir, en lo posible, jubilando" la mascarilla, pues además es "voluntad" de la "gran mayoría" de los ciudadanos y, también, "de los que nos gobiernan".
Como ha reconocido, su uso "es un incordio". "Y a mí, que ya tenía las orejas grandes, me las ha puesto igual que 'Dumbo', ese elefante que hacía tanta gracia a los niños y a todos cuando veíamos la película", ha apostillado Revilla, para recordar el "año y pico" de uso y "con la oreja que tengo", ha insistido.
A ello se suma el problema de que "te la olvidas" y "no te la pones". Así, con todo, cree que en el mes de agosto o incluso para mediados de julio "habrá que llevarla en sitios muy especiales", pero no en la playa, por la calle o en espacios abiertos, aunque ha precisado que esto es una "opinión personal" suya.