Son muchos los factores que intervienen en nuestro rendimiento cuando nos disponemos a realizar una actividad física. Una de las claves está en realizarla o no de manera correcta, favoreciendo a la mejora de nuestros resultados.
Según especialistas de deporte, el entrenamiento invisible es aquel conjuntos de actividades complementarias que se realizan antes o después de la actividad física, y que, además, influyen en esta. Esto quiere decir que no importa solo la hora de gimnasio, running o deporte que hagamos: también hay que tener en cuenta factores importantes como una buena alimentación y hábitos saludables, calentar y estirar antes y después de practicar ejercicio…
Factores condicionantes de la actividad física
Llevar una dieta saludable es un factor de peso e importancia a la hora de compaginarlo con la actividad física, ya que los alimentos son los que nos proporcionan los nutrientes necesarios y la energía para llevar a cabo la actividad física. Es imprescindible una buena alimentación combinada con la práctica deportiva para lograr estar en buena forma.
Una alimentación equilibrada y saludable no es lo único. Descansar es una parte fundamental del proceso, siendo muy importante dormir las horas suficientes y que el sueño sea de calidad, ya que de esta manera se mejorará nuestro sistema inmunitario y nuestro cuerpo (en especial nuestros músculos) podrán recomponerse tras la actividad física. Otra de las claves es evitar los malos hábitos, entre los que se encuentran el consumo de alcohol y tabaco.
La hidratación antes, durante y después de hacer ejercicio es de gran importancia, no solo para nuestro cuerpo, sino para un buen rendimiento durante la práctica. Este hábito debe cumplirse a rajatabla, por eso no podemos olvidarnos tampoco de los 2 litros diarios que debemos beber, aunque la cantidad de agua siempre variará según factores como el clima, la actividad o nosotros mismos.
Para evitar lesiones no debemos olvidarnos del calentamiento previo, en el que activaremos nuestros músculos poco a poco. Tampoco podemos olvidar los estiramientos: gracias a ellos también evitamos lesiones y tensiones musculares, además de ganar flexibilidad. Lo ideal sería pode realizarnos revisiones médicas de manera frecuente para comprobar que todo está en orden.