Hace una semana se levantó la bandera de los trabajadores del metal de Cádiz en huelga, ahora apelan a la figura de uno de los referentes históricos de la izquierda, la del coordinador general de Izquierda Unida, Julio Anguita.
La secretaria general de Vox en el Congreso, Macarena Olona, a quien muchos sitúan en las quinielas como cabeza de listas del partido de Abascal en las próximas elecciones andaluzas, ha asegurado que el histórico líder de IU y exalcalde de Córdoba, Julio Anguita, "de quien se sentiría orgulloso" es de su formación porque vería representado en ella el "espíritu de la lucha".
Olona, que ha hecho mención al discurso de Anguita en 1999 para subrayar que Vox no se resigna, ha protagonizado un acto en Lepe arropada por todos los parlamentarios de la formación en Andalucía para conmemorar el tercer aniversario de la entrada de los de Abascal en el Parlamento andaluz.
La diputada ha señalado que la Comunidad "va a hacer historia cuando, después de las siguientes elecciones autonómicas, sea el primer gobierno en el que Vox asuma responsabilidades de gestión.
La respuesta de Olana se ha hecho llegar a través de las redes sociales del coordinador general de IU en Andalucía, Toni Valero, que además de calificarla de fascista le advertía a que no usara el nombre de Julio Anguita.
"No me gusta que me utilicen, y sobre todo que me utilicen personas que tienen esta ejecutoria" (en referencia a Vox). Julio Anguita, 2019.
— Toni Valero🔻 (@Toni_Valero) December 2, 2021
No ensucies la memoria de Julio, fascista. pic.twitter.com/BraanugSBg
Olona ha destacado la importancia de Andalucía por ser la primera Comunidad en la que Vox obtuvo representación parlamentaria y ha vaticinado que volverá a ser una referencia a nivel nacional tras los próximos comicios autonómicos.
Durante su intervención ha declarado que Vox habla con una única voz a nivel nacional y exigen, entre otras cosas, una reducción drástica del gasto político. Porque sólo en Andalucía, según ha apuntado, "con las auditorías al sector instrumental o chiringuitos de colocación del PSOE y ahora de afiliados y simpatizantes de PP y Ciudadanos, pagamos para su mantenimiento unas cifras astronómicas que salen de las arcas públicas".
Por lo demás, ha tirado del discurso habitual de Vox y de sus grandes banderas electorales, señalando que solamente Vox sostiene que la violencia no tiene género ni tampoco sexo.