Los primeros resultados obtenidos del ensayo clínico que se está realizando en Reino Unido afirman que mezclar dos vacunas anticovid multiplica las reacciones adversas. Este estudio se llama "Com-Cov" y los resultados todavía son preliminares. La investigación ha consistido en la mezcla de una dosis de la vacuna de AstraZeneca y otra de Pfizer y viceversa, lo que ha generado un aumento de reacciones leves y moderadas, es decir, síntomas de cortas duración pero más frecuentes que si se inoculan las dosis de la misma vacuna, según el estudio que ha publicado la revista ‘The Lancet’.
Esta es la incertidumbre que hoy parece calmarse al conocerse los resultados de este estudio. En España lleva varios días con inseguridades, lo que ha desembocado en el atraso de la segunda dosis en los pacientes de AstraZeneca. Por ejemplo, en el caso de Andalucía, que debían haberse vacunado de la segunda dosis a las tres semanas y no que ha sido pospuesta a cuatro semanas a los menores de 60 años. Así ha ocurrido en las demás comunidades llegando a afectar a algo más de un millón de personas.
Es por ello, que desde el principio de este año el equipo de científicos de la universidad británica de Oxford comenzó la investigación sobres los efectos adversos que podría acarrear la mezcla de ambas vacunas que son fabricadas por diferentes farmacéuticas. Llegando a obtener un resultado poco esperanzador ya que las reacciones se veían incrementadas. Para ello, analizaron en personas mayores de 50 años, por lo que los responsables del estudio mencionan que existe la posibilidad de que tales reacciones puedan ser más prevalentes en grupos de edad más jóvenes.
"Los resultados de este estudio sugieren que la administración de dosis mixtas podrían provocar un aumento en las ausencias laborales el día después de la vacunación, y esto es importante tenerlo en cuenta al planificar la inmunización de los trabajadores de la salud", advierte el doctor Matthew Snape, profesor de vacunación en la Universidad de Oxford e investigador jefe de este ensayo.
Tras estos primeros resultados, el equipo de investigación seguirá trabajando para dentro de unos meses obtener los resultados sobre mayor o menor efectividad de la respuesta inmune al combinar estos dos tipos de vacunas. Aunque, hay que destacar tal y como ha afirmado el equipo británico que hasta ahora no hay preocupaciones de seguridad.