Un nuevo estudio de la Sociedad de Angiografía e Intervenciones Cardiovasculares (EEUU) publicado en la revista 'JSCAI' ha revelado un menor riesgo de eventos cardiovasculares en los pacientes con diabetes de tipo 1 en comparación con los que padecen diabetes de tipo 2.
"Las conclusiones del estudio sugieren que el riesgo cardiovascular asociado a la diabetes de tipo 1 es menor de lo que se pensaba. Nuestros hallazgos indican que la diabetes tipo 1 se asocia con un riesgo significativamente menor de eventos cardiovasculares en comparación con la diabetes tipo 2, incluso después de ajustar por varios factores de confusión como la edad, el control de la diabetes y la función renal", ha señalado el director de investigación clínica cardiovascular en Baystate Medical Center en Springfield, Andrew M. Goldsweig.
Para el estudio, Goldsweig colaboró con la endocrinóloga pediátrica de Baystate Bracha Goldsweig, para examinar el Registro Metabólico Veradigm, operado en colaboración con el Colegio Americano de Cardiología, que incluye registros longitudinales de 1,5 millones de individuos de más de 700 instalaciones.
El análisis identificó a casi 6.000 personas con diabetes de tipo 1 y comparó sus tasas de eventos cardiovasculares con las de personas con diabetes de tipo 2. Cuando se controlaron los factores de confusión, los resultados mostraron que las personas con diabetes de tipo 1 presentaban tasas más bajas de infarto de miocardio (IM), intervención coronaria percutánea (ICP), ictus e isquemia de las extremidades en comparación con las personas con diabetes de tipo 2.
No se observaron diferencias significativas en las tasas de infarto de miocardio, ictus e isquemia de las extremidades. Tampoco hubo diferencias significativas en las tasas de cirugía de bypass entre ambos grupos.
En este punto, Bracha Goldsweig ha destacado la importancia de distinguir entre pacientes con cada tipo de diabetes para desarrollar estrategias de tratamiento específicas.
"La diabetes de tipo 1 y la de tipo 2 son enfermedades fundamentalmente diferentes. Las personas con diabetes de tipo 1 no producen insulina, mientras que las personas con diabetes de tipo 2 presentan insensibilidad a la insulina. Nuestro estudio demuestra que no es adecuado tratar a todas las personas con diabetes de forma idéntica, y son necesarios estudios específicos para la diabetes de tipo 1 con el fin de comprender los mejores enfoques terapéuticos", ha afirmado Bracha Goldsweig.
"Las personas con diabetes de tipo 1 tienen ahora una esperanza de vida normal, y es crucial estudiar a esta población para garantizar que reciben la mejor atención posible", ha finalizado Bracha Goldsweig.
Esta investigación marca la primera vez que los doctores Goldsweig, que son cónyuges, publican juntos, lo que pone de relieve la importancia de la colaboración multidisciplinar. El proyecto se ha financiado con una beca de investigación de la Sociedad de Angiografía e Intervenciones Cardiovasculares.
"Nos entusiasmó la idea de trabajar juntos en un campo en el que nuestros campos se solapan. El apoyo de la subvención ECRG de la SCAI fue crucial para hacer posible esta investigación", ha finalizado Andrew Goldsweig.