En un mundo tan conectado, es muy difícil quitar el hábito de revisar el teléfono. No somos capaces ni de apagar el móvil ni para dormir, siempre ha una excusa para mirar la pantalla y la pandemia ha reforzado ese lazo que tenemos con la tecnología.
Quedan muy atrás los días en los que se organizaban las reuniones con antelación y si había algún cambio solo hacía falta una llamada de teléfono. Internet nació como una herramienta de trabajo y hoy está ganando como espacio de ocio.
Debemos de “marcar un umbral que nos diga cuál es el tiempo óptimo para estar en Internet y cuál es la barrera entre información útil o pérdida de tiempo, no tiene una respuesta única” informa el experto Juan Merodio.
No hace falta tener nomofobia –el miedo a no poder estar con el móvil en la mano- para echarlo en falta. Sin embargo, hay varios síntomas que pueden indicar que sufres de esta afección:
- Te sientes vulnerable sin tu móvil
- Lo consultas decenas de veces al día
- Cada vez que se te olvida sufres ansiedad
- Te estresas cuando está apagado, donde no hay cobertura o no tiene batería
El 77% de las personas entre 18 y 24 sufren nomofobia mientras que los usuarios entre 24 y 34 años son extremadamente dependientes.
Un mundo equilibrado
Esto no es sano ni para nuestra postura, nuestra mente ni para nuestra ansiedad. Las pantallas de los móviles le quitan la atención a todo lo demás que hay en el mundo y pueden llegar a causar estrés digital si se usan mucho.
A continuación, te daremos algunos consejos para una saludable desintoxicación digital.
- Limita tu acceso a redes sociales. Intenta estar como máximo 30 minutos al día divididos en tres momentos diferentes. Nunca viene mal evitar polémicas públicas en Twitter o eliminar a un mutual tóxico.
- Contesta sólo a aquello que merezca la pena.
- Consulta los medios de comunicación de forma crítica.
- Procura desconectar. Esto quiere decir que te olvides a propósito tu móvil en casa cuando salgas con tus amigos o pareja. ¡Ya hará las fotos otro!
- Disfruta del ocio de internet, pero no dejes que maneje todo tu tiempo libre
- Ten otras actividades no digitales como leer un libro, escuchar música, un paseo, una llamada de teléfono…
Es verdad que no estamos en el mejor momento de la historia para ser sociables, pero no por eso tenemos que perder nuestro lado más personal, cálido y humano.