lunes. 25.11.2024

La Iglesia católica española ha reconocido en un documento publicado en el marco del proceso sinodal que "en la práctica" no se está teniendo en cuenta el papel de la mujer en la vida de la Iglesia.

Así aparece matizado en un documento de síntesis publicado este viernes por la Conferencia Episcopal Española (CEE), que recoge las aportaciones que han enviado las diócesis, movimientos, congregaciones y distintos grupos sobre las prioridades para el futuro de la Iglesia, de cara al Sínodo sobre sinodalidad convocado por el Papa Francisco.

El texto final difundido este viernes por la CEE introduce algunos cambios con respecto al documento que fue presentado el pasado sábado, a partir de las sugerencias que salieron del encuentro celebrado en la sede de Añastro.

Así, en el documento publicado el pasado sábado se leía que resulta "muy relevante el contraste que se expresa en relación al papel de la mujer, invitándose a un discernimiento sin miedo, desde la común dignidad bautismal".

Mientras, en la versión final presentada este viernes se sustituye el redactado por el siguiente: "Muy relevante resulta el contraste que se expresa en relación con el papel de la mujer: se manifiesta de modo recurrente el deseo de que se le tenga en cuenta en la vida de la Iglesia, pero en la práctica no está siendo así y está costando mucho avanzar en esta dirección".

En todo caso, se mantiene la propuesta de reconocer "definitivamente" el papel de la mujer en la Iglesia, "en condiciones de igualdad" y "a todos los niveles eclesiales", tal y como ya se recogía en el texto inicial, aunque no se menciona específicamente el sacerdocio femenino.

También se aprecia un cambio en los párrafos referidos al "escándalo de los abusos sexuales" y, si en la primera versión del texto se hablaba de "avanzar hacia una mayor transparencia", ahora se especifica que la Iglesia quiere avanzar hacia una "total" transparencia, además de reconocer el mal causado, reparar a las víctimas y aumentar la protección, que ya venía recogido en el texto inicial.

Por otro lado, se aprecian algunas modificaciones en la redacción del texto, por ejemplo, cuando se refiere a la acogida. De esta forma, en la versión final de la síntesis, al abordar el tema de la acogida, se sustituye "pobres y marginados" por "situaciones de pobreza y exclusión social"; "personas con discapacidad" por "personas con discapacidad o con diversidad funcional" o personas "con situaciones familiares o afectivas diversas" por "personas con diversas situaciones familiares, afectivas o sexuales".

Además, en cuanto al fomento del diálogo con el mundo y la cultura, con otras confesiones religiosas y con la "increencia", en el texto definitivo se especifica que este diálogo debe hacerse "desde la crítica constructiva en el seno de la propia Iglesia y hacia la sociedad actual".

Igualmente, se añaden algunos conceptos como la pastoral de los mayores; se insta a promover los ministerios laicales y los procesos catequéticos con niños y adolescentes.

Al final del documento, se pone en valor el proceso sinodal y se indica que "con independencia del resultado final del ejercicio de discernimiento que ha de llevarse a cabo en las siguientes fases", lo experimentado "resulta muy valioso en sí mismo para la Iglesia en España, por los frutos que está generando".

La Iglesia española ya presentó en junio del año pasado una síntesis en la que recogía las propuestas de las diferentes diócesis españolas y, por tanto, de los católicos españoles, para el futuro de la Iglesia, y entre ellas, se sugería abrir un diálogo sobre el celibato opcional, la ordenación de casados y el sacerdocio femenino. Este documento ya se envió a Roma.

A partir de todas las síntesis enviadas por las iglesias de todo el mundo, el Vaticano redactó el 'Documento de trabajo para la etapa continental' que es sobre el que ahora han trabajado los obispos, sacerdotes, religiosos y laicos en España para preparar las propuestas que llevarán a la Asamblea continental europea del Sínodo 2021-2024 que se celebrará del 5 al 9 de febrero en Praga.

En este encuentro, la CEE estará representada por su presidente, el cardenal Juan José Omella; el obispo coordinador del equipo sinodal, Vicente Jiménez; el secretario del equipo sinodal, el sacerdote Luis Manuel Romero; la hermana María José Tuñón, como responsable de la Vida consagrada y miembro del Equipo sinodal; y Dolores García Pi, presidenta del Foro de Laicos y también miembro del equipo sinodal de la CEE.

La Iglesia española admite que "en la práctica" no está teniendo en cuenta el papel de...