El 32% de los españoles recortaría, en el caso de ser necesario, su gasto en alimentación y un 87% en la restauración por el alza sostenida en el coste de los alimentos, según los datos del 'Barómetro Food sobre hábitos de alimentación saludable' que publica anualmente Edenred.
En concreto, la subida continua del precio de los alimentos es una de las principales preocupaciones de los españoles. Así, el 96% considera que los alimentos continuarán incrementando de precio en los próximos meses, impactando en su economía y la calidad saludable de su dieta.
La reducción del gasto en la restauración ya lo perciben los hosteleros, ya que un 44% de los encuestados reportan un menor número de clientes dentro de este contexto inflacionario.
La encuesta muestra una cierta cohesión entre los trabajadores de todo el mundo. Hasta un 75% destaca el aumento del poder adquisitivo como la principal ventaja de disponer de los 'ticket restaurant'. En el caso de España, los encuestados se sitúan en esta media, lo que supone que tres de cada cuatro trabajadores reconoce sus beneficios para hacer frente a la inflación.
Según estos datos, las tarjetas comida parecen ser una solución útil para asegurar el presupuesto alimentario de los hogares. Incluso, en el contexto de inflación actual, estos beneficios sociales se posicionan como una forma de mantener las visitas a restaurantes, ya que el 59% de los encuestados en España afirma que van más al restaurante gracias a estas tarjetas.
En España, hasta un 56% está de acuerdo en que aceptar estas tarjetas de comida supone un aumento en su volumen de facturación y un 58% destaca que los clientes que disponen de este servicio acuden a comer más a menudo que aquellos que no lo tienen.
Por otro lado, el barómetro de este año constata también otra tendencia que la población activa sigue prestando atención a mantener una dieta sana y equilibrada. Este es el caso del 78% de los encuestados, especialmente en el Sur de Europa (Portugal, Italia y España), países en los que la dieta Mediterránea tiene especial calado.
Los restaurantes confirman también esta situación y hasta un 74% de los encuestados en España afirma haber modificado sus hábitos y sus proveedores en favor de productos más sanos y de cercanía. Incluso, el 81% apunta que los consumidores valoran estos cambios y la apuesta por una cocina más sana y un 60% confirma que la oferta de comida saludable es una de las principales razones de los comensales para visitar su restaurante.
En el caso de España, los consumidores justifican su interés por alimentos saludables por razones de salud (99%) o por su sabor o variedad (72%). Además, hasta un 53% asegura que optaría por una dieta más sana por motivos animalistas y ambientalistas.
Sin embargo, el coste de estas opciones saludables continúa siendo uno de sus lastres, al menos, en la visión de los restaurantes, ya que en el caso de España, hasta un 54% considera que elaborar estas opciones de menú más sanas resulta más caro.