A lo largo y ancho de este mundo hay mucha gente que ve una película varias veces y, por amor a esta, se autoconvence de que puede hacer lo mismo. Hemos visto ya a gente pegándose con malhechores en plena calle enfundados en lycra, a personas sin un excesivo talento musical hacer duetos en plena calle y hoy, por fin, hemos visto al nuevo aprendiz de Dominic Toretto.
El nuevo protagonista de "Fast & Furious España" era un conductor francés, que circulaba con un Porsche 911 Turbo a casi 295 km/h cerca de Fuentes de Oñoro, en Salamanca. El detenido, que cuenta 35 años, fue interceptado por la policía a la altura de Ciudad Rodrigo, para luego haber sido imputado con un delito de seguridad vial. Además de esto, el conductor se quedó a 2 kilómetros de superar el récord de velocidad que se tiene en España en carretera, firmado en 2016 por un conductor que iba a 297 km/h y que poseía una discapacidad en la pierna (no paran las sorpresas no).
No sabemos si la policía le ha informado de que no ha superado este récord o de si el detenido tenía intención de superarlo, pero lo que sí sabemos es que se enfrente a una multa de más de 3.000 euros y a la retirada del carné por casi un año. Si es que ya lo dice Toretto, lo importante no es correr, "lo más importante es la familia".