En una consulta de debate organizada por la diócesis de Barcelona, se ha querido abrir el debate sobre temas tabús y proponer reformas dentro de la Iglesia. "Queremos una Iglesia que abra la posibilidad al celibato opcional y el acceso al presbiterado de hombres casados (…). Que las mujeres asuman un papel activo y se avance en su acceso al diaconado y, si fuera posible magisterialmente, al presbiterado". Pretenden que su voz sea escuchada para abrir diálogo y debate por toda España.
Estas medidas se plantean en un momento en el que el Papa Francisco propone un espacio para aceptar peticiones, abrir caminos y afrontar una profunda renovación entre católicos.
Esta petición podrá ser recogida por toda la Iglesia española, que el próximo 11 de junio debatirá todas las propuestas que han llegado de las 70 diócesis de nuestro país, para elaborar una síntesis que se llevará a la Iglesia europea y, de ahí, al Vaticano.
También, la Iglesia de Barcelona aboga por el "reconocimiento real y efectivo de la igualdad y la dignidad de todos los bautizados, especialmente de ellas, superando toda forma de discriminación”, al mismo tiempo que se reclama una institución que aplique "con decisión la doctrina de la Exhortación apostólica Amoris laetitia sobre la vida familiar y la sexualidad, de manera que la Iglesia sea percibida principalmente como un ámbito de respeto y acogida”, fundamentalmente con los divorciados vueltos a casar o sectores tradicionalmente señalados y castigados de la Iglesia, como el colectivo LGTBI. “Falta coherencia entre lo que se predica y lo que se hace: amar a todos sí, pero no se ve bien el amor entre personas del mismo sexo”, condenan.
