Para los más despistados, el concepto armario cápsula surgió en los años 70 para acabar con los armarios abarrotados de ropa que nunca nos ponemos. Lo que pretende es tener un armario sencillo, bonito y eficaz, es decir, pocas prendas con las que crear múltiples conjuntos.
Independientemente de la estación en la que estemos, un vaquero, da igual pitillo, mini flare o mom fit nunca puede faltar. Es un básico que queda bien con todo, tanto para ir arreglada o informal, ahora bien, hay que saber con qué prendas nos apetece realzar nuestra figura ese día. Ahora que nos hemos adentrado en la primavera, necesitamos una camiseta corta, ya sea lisa, con estampado o dibujo y que sea fluida para conjuntar con nuestros jeans. ¿Refresca? Las chaquetas son siempre nuestras aliadas, las hay de todo tipo, pero tampoco nos tenemos que complicar, para ir divinas, ya que una vaquera, de punto o tela completan el junto. Para los zapatos ocurre lo mismo, unas bambas blancas o unas sandalias y ya hemos creado nuestro primer conjunto sencillo pero chic con prendas que podremos ir empleando también en los siguientes looks.
Imaginemos que hace un día soleado, los termómetros se han disparado y casi parece verano, aunque sepamos que cuando caiga la noche refrescará estamos ansiosas por ponernos ropa de verano y hacemos un mix raro de prendas. No os preocupéis gracias. A nuestro armario cápsula bien estructurado no vamos a complicarnos la vida ya demás vamos a ir monísimas. Optaría por un vestidito fluido (a elección de cada una si es mini, midi o extralargo) porque con la chaqueta, anteriormente citada, y una botas o botín cowboy va a dar igual el corte, color o estampado del vestido, es una fórmula que siempre funciona.
Complementos
Muchos looks sosos, pueden reavivarse con los complementos algo que tampoco pueden faltar pero que también, a muchos de ellos les podremos dar varias funcionalidades. Esto es el caso de los pañuelos de lino o seda. Son súper versátiles y seguro que muchas de sus opciones ni si quiera las habías contemplado. Esta prenda, a aparte de para colocar en cuello o en la cabeza, también sirven como cinturón, se va pasando por las trabillas y se finaliza con una lazada o nudo. Pero además hay una cuarta forma que es como top. Estos pañuelos, al igual que los pareos tiene mil y una formas, dependiendo de donde realices el nudo o si te lo atas al cuello, o espalda. De nuevo, hemos vuelto a crear un nuevo outfit con el pañuelo convertido en top y con los vaqueros nombrado al inicio.
Los cinturones, son sin duda mi complemento favorito. Adornan cualquier conjunto y aparte de colocarlos en la cadera, en la cintura, con una chaqueta o americana entallada ayudarán a reforzar y enmarcar esa zona de la mujer tan destacada.
Para finalizar, las mujeres tenemos que llevar nuestras pertenencias en un bolso. No importa cuántos tengas, sino la de formas y variedades que puedas darle. Las cadenas o los enchanches ayudar a cambiar la largura convirtiendo así esté complemento en un simple bolso colgado del hombro (correo altura media) o en una más original, en versión bolso, baguette (con la correa súper corta). Si ya dejamos la correa larga, éta permitirá ponérnoslo cruzado y si se la quitamos por completo se convertirá en un bolso de mano.
En conclusión, un mismo bolso con mil versiones diferentes, una misma chaqueta con vaqueros o con vestido, un pañuelo que sirve tanto para un roto como para descosido.
CONSEJO; No te líes con mil prendas diferentes, muchas veces en lo sencillo está lo elegante.
