Más del 32 por ciento de los jóvenes asegura tener problemas de autoestima originados por el uso de las redes sociales, según el 'VI Estudio de Salud y Estilo de Vida' de Aegon, que versa sobre el estado de salud emocional de los españoles en relación al uso de estas tecnologías.
Por detrás, se encuentran los trastornos del sueño (18,5%), la dependencia (16,3%) y la sensación de ansiedad por no estar conectado (15,5%). Aunque, en menor medida, también existen otros problemas graves como la depresión (9,9%) o el acoso de otros usuarios de la red (7,5%). Además de este grupo, son las mujeres y las personas sin hijos los que más sufren distintos problemas por el uso de estas formas de comunicación.
Este informe, realizado en 2023, fue realizado sobre 1.600 individuos de más de 18 años de ambos sexos. Al analizar de forma general la respuesta de los españoles en este sentido, estos consideran que las redes sociales influyen en su salud emocional. Un 39,6 por ciento de la muestra considera que tienen consecuencias negativas o muy negativas (4,8 puntos porcentuales menos que en el año anterior) frente al 45,3% que considera que no tienen ningún efecto negativo a nivel psicológico.
Es destacable cómo este año hay un 3,1 por ciento de los encuestados que considera que las redes sociales tienen una influencia muy positiva en su día a día, dato que asciende 1,6 puntos porcentuales frente al ejercicio anterior.
Al preguntar sobre cuál es la influencia negativa asociada a las redes sociales, se mencionan los problemas de autoestima (10,8%), los trastornos del sueño (9,1%), la dependencia generada (8,4%) o ansiedad por no estar conectado (6,3%). Sin embargo, para un 74,2 por ciento no existe relación entre las redes sociales con ninguno de los problemas anteriormente mencionados.
MÁS RIESGOS PARA LA SALUD MENTAL QUE BENEFICIOS
Segmentando las conclusiones por perfiles, aquellos que creen que las redes sociales tienen una influencia más positiva son las personas que teletrabajan (25%) y los que se encuentran entre el grupo de edad de entre 18-25 años con el mismo porcentaje.
No obstante, en todos los grupos de personas hay un mayor número de personas que consideran que el uso de las redes conllevan más riesgos que beneficios para la salud mental. En el caso del colectivo de 56 a 65 años, se encuentra el porcentaje más alto de personas que le ven una influencia muy negativa (11,4%) seguido del grupo de personas de entre 26 a 40 años (9,9%).
Asimismo, las personas que no han teletrabajado en el último año (42%) han visto afectada su salud mental comparado con la gente que lo ha hecho (33.3%) o ha disfrutado de una propuesta de trabajo mixta (36,5%).