sábado. 23.11.2024

Con una donación personal, el papa Francisco decidió apoyar la construcción de dos salones multifuncionales y comedores para familias y menores acogidos en el campamento permanente de Lipa (Bosnia-Herzegovina), actualmente en construcción. 

Este jueves 1 de julio, en presencia del nuncio apostólico en Bosnia y Herzegovina, monseñor Luigi Pezzuto, tendrá lugar la ceremonia de colocación de la primera piedra. 

Según informó la agencia de prensa católica KTA, la Cáritas diocesana de Banja Luka, la Ambrosiana y la ONG de IPSIA-ACLI (Instituto para la Paz, el Desarrollo y la Innovación) también contribuirá a la creación y gestión de los nuevos entornos. 

A través de la nunciatura en Sarajevo, el Papa quiso expresar "su cercanía y cuidado por las condiciones de los campamentos en la zona de Lipa, un lugar bastante aislado que aún carece de algunos servicios básicos de infraestructura, especialmente para menores y familias", explicó el nuncio. 

“La donación del Santo Padre -agregó- representa un aporte importante para hacer del nuevo campamento permanente de Lipa un lugar más humano y hospitalario. Este apoyo representa la segunda donación del papa Francisco a favor de los migrantes que se desplazan por Bosnia y Herzegovina y sigue a la primera donación en octubre pasado que permitió la creación de dos 'rincones sociales' en los campos de refugiados de Usivak y Sedra”. 

La antigua ciudad de tiendas de campaña de Lipa (zona de Bihac) fue destruida por un incendio el pasado 23 de diciembre, lo que obligó a 1.500 refugiados abandonados bajo la nieve y a muy bajas temperaturas a abandonarlos. En la zona, inmediatamente después del incendio, se instaló un nuevo campamento temporal. 

Mientras tanto, se desarrolló un proyecto para la creación de un campamento permanente en Lipa, destinado a convertirse en un punto de acogida de migrantes. Con el apoyo del papa Francisco, el campamento ahora también contará con ambientes adecuados para recibir a familias y menores.

“Es necesario -enfatizó monseñor Pezzuto- que estas personas vivan mejor materialmente para suavizar también sus relaciones y sus reacciones, fruto de muchos años de sufrimiento y viajes que realizaron esperando encontrar un lugar donde refugiarse”. 

Para el nuncio, “la gente que vive aquí son presos a los que les gustaría salir pero todo está cerrado. Es necesaria la solidaridad de todos los Estados para que haya una distribución equitativa en varios lugares y en varios países”.

La ruta de los Balcanes es una de las rutas de entrada a Europa para migrantes y solicitantes de asilo. Durante los últimos cinco años, cientos de miles de personas huyeron de sus países en peligro, guerra o persecución y han transitado por los Balcanes. 

Desde 2018, el paso de esta ruta suele terminar en Bosnia-Herzegovina, donde se calcula que hay unos 9.000 migrantes y solicitantes de asilo, la mayoría de los cuales se encuentran alojados en campamentos. Se trata de familias enteras, hombres, niños y menores no acompañados.

El Papa realiza una donación personal para los acogidos en un campamento de...