18 de marzo de 2021, 10:02
La andadura Europea del Atlético de Madrid tocó ayer a su fin. Habrá que centrarse en la liga, pero no es menos cierto que la imagen que mostraron los pupilos del Cholo ante el Chelsea fue más que preocupante.
El Atleti salió en tromba los primeros cinco minutos, pero eso es lo quele duró la esperanza a la afición colchonera, viendo cómo el Chelsea de Thomas Tuchel tomó las riendas del partido para no soltarlas.
El cuadro inglés devolvió la intensidad y la presión en campo rival. El repertorio local les permitía ser peligrosos en distintos estilos: a la contra con mucha velocidad y precisión comandados por Werner madurando la jugada. El Atleti se rebeló a ser sometido con una buena arrancada de Joao Félix que truncó Kanté.
El Chelsea golpeó en una contra mortal, con Ziyech, Havertz y Werner, un tridente que no fue capaz de controlar el conjunto madrileño en todo el partido. De un ataque visitante, el Chelsea lanzó a Werner y este asistió a Ziyech.
Con la diestra y algo de fortuna, el zurdo marroquí batió a un Oblak que cerca estuvo de pararla. Con 1-0 abajo, el Atlético necesitaba hacerle al Chelsea los mismos goles que en los 12 partidos invicto con Tuchel. La primera parte murió con algo de ida y vuelta, un disparo de Joao Félix como la mejor opción rojiblanca.
Los 'blue' buscaron aprovechar la zozobra de un Atlético tocado al descanso, obligado a un noche de épica. El 'Cholo' cambió esquema con tres centrales metiendo a Hermoso pero la adaptación sobre el césped fue la inglesa. El Chelsea siguió llegando, encontrando a sus hombres de arriba. Ziyech robó a Saúl y Werner tuvo el 2-0 que evitó Oblak con una fuerte mano abajo ante el disparo cruzado del delanteto alemán.
El balón pasó muchos minutos en los pies del Chelsea y Joao Félix fue de nuevo quien lo intentó. Llorente asomó también tarde sin la gloria de Anfield y Emerson marcó a la contra el 2-0 ya en el 94'.
Agarrón a Carrasco y la sonrisa de Suárez
El partido dejó un par de acciones polémicas, una de ellas fue un claro a la par que leve agarrón de Azpilicueta a Carrasco, pero que el árbitro no consideró suficiente para pitar la pena máxima. Otra acción clave fue la expulsión de Savic por roja directa. En un córner botado en corto por el Atlético, el central montenegrino le propinó un codazo en el pecho a Antonio Rüdiger, dejando así a si equipo con un hombre menos.
Una imagen a destacar fue la sonrisa irónica de Luis Suárez al ser cambiado en el minuto 60 por Diego Pablo Simeone. El ariete uruguayo dejó claro su descontento y ni siquiera saludó al técnico argentino al enfilar el banquillo.
