Las voces críticas por la celebración de este verano de los Juegos Olímpicos de Tokio siguen en aumento. Hace unas semanas, una petición de 350.000 japoneses pedía a al presidente del Comité Olímpico Internacional (COI), Thomas Bach, la cancelación del evento deportivo. Ahora, según una encuesta de Reuters, el 70% de los empresarios también son reacios a la celebración.
Quedan nueve semanas para que deportistas de todo el mundo acudan a Tokio a participar en los Juegos Olímpicos, pero el sistema sanitario japones sigue bajo presión y el ritmo de vacunación en el país no es muy elevado, tan solo el 4% de los japoneses ha recibido la vacuna contra el Covid-19. Por ello, los empresarios creen que no es un buen momento para que ciudadanos de todo el mundo acudan al país.
Según la encuesta de Reuters realizada en los meses de febrero, el 37% de las empresas japonesas quiere cancelar directamente los Juegos y el 32% considera que deberían aplazarse a otro año o a meses posteriores, según avance la estrategia de vacunación.
A pesar de ello, tanto el Gobierno de Japón como el Comité Olímpico no se plantean otro aplazamiento y justifican que la cancelación de los juegos acarrearía unas grandes perdidas para la economía japonesa.
