Los Juzgados de Barcelona se han encontrado en los últimos días con dos casos muy similares. Por un lado, se ha reconocido la incapacidad permanente total a una trabajadora con una discapacidad del 65% a causa de fibromialgia. Por otro lado, se ha concedido también la discapacidad permanente total por las mismas razones a una empleada del hogar.
La primera mujer, era trabajadora en una empresa de envasado y tenía limitaciones a causa de la fibromialgia que sufre. Además de esta enfermedad, también cuenta con trastorno límite de la personalidad; trastorno adaptivo y cervicodorsolumbalgia crónica.
En el segundo caso concedido, la mujer trabajaba como empleada del hogar que además de sufrir fibromialgia tiene hernia, síndrome de fatiga crónica y otras patologías.
A través de la incapacidad permanente total el trabajador queda inhabilitado en su profesión habitual, pudiendo realizar otro trabajo adaptado a la situación de la persona.