Oliver, un niño de dos años y medio, fue diagnosticado hace unas semanas con cáncer en el cerebro. Actualmente vive en México, lugar donde los médicos no se atreven a intervenirlo, pero en España, en el Hospital Sant Joan de Déu se han ofrecido a hacer, con unas expectativas de poder retirar hasta un 80% del tumor. Sus padres no tienen el dinero para poder trasladar a Oliver de una manera segura, por lo que un empresario anónimo se hizo cargo de todos los gastos de un avión medicalizado para que Oliver pueda partir con su madre hacia Barcelona este lunes.
El donante anónimo explicó que quiere ayudarles porque tiene un hijo de esa misma edad: “Tú dime a quién tengo que hacerle el pago. No te preocupes por e dinero, a mí me va bien y no hay nada mejor en lo que yo pueda gastarlo”.
Tras conocer la enfermedad de Oliver, el empresario hizo todo lo que estaba a su alcance para poder dar con ellos a través de algún medio de comunicación. El medio más rápido y seguro para trasladar a Oliver es un avión medicalizado que viaje desde Cancún hasta Barcelona, por lo que este donante ha pagado los 196.000 euros que cuesta este medio de transporte, el cual se encuentra equipado con todos los instrumentos de una unidad de cuidados intensivos con los que cuenta un hospital.
Mientras que la madre viajará con Oliver en el avión medicalizado, el padre lo hará en un avión comercial junto con todas sus pertenencias; tomaron la decisión de abandonar México para vivir en Barcelona.
Adicional a esta gran ayuda del empresario anónimo, la familia de Oliver ha recibido numerosas donaciones de particulares, teatros, hermandades, pueblos y asociaciones para que su viaje de México a España se pueda materializar, por lo que no podrían estar más agradecidos.
“Es todo súper emocionante, eso nos demuestra que sigue habiendo gente buena en el mundo”
La llegada de Oliver a España se ha visto retrasada, a pesar de que ya estaba todo listo para el viaje. El vuelo de la compañía EMS se ha retrasado hasta mañana. Los padres del pequeño se encuentran desesperados, ya que le han retrasado el vuelo dos veces y las aerolíneas comerciales no le permiten comprar billetes por el delicado estado de salud de Oliver y por no contar con una autorización médica. Consideran que el martes es el día límite para poder trasladarlo, ya que esto implica su llegada a España el miércoles por las diferencias horarias.
"Si no volamos se nos va a morir aquí, no lo van a operar. Están jugando con el tiempo de nuestro hijo"
La familia del menor pide volar de manera urgente, ya que los médicos le dieron a Oliver un estimado de 15 días de vida, de los cuales ya han pasado 7 mientras buscaban poder trasladarlo.