Desde que la intervención militar estadounidense derrocó al régimen talibán en Afganistán en 2001, los talibanes han obtenido una gran financiación de distintas fuentes, sin la cual jamás hubiesen podido reconquistar el país.
En 2020 The Conversation publicaba que los talibanes habían ingresado un total de 1.600 millones de dólares de diversas fuentes, demasiado dinero teniendo en cuenta qe se trata de una milicia compuesta por 75.000 combatientes y que en esa franja de tiempo el gobierno oficial de Afganistán recaudó 5.550 millones de dólares.
Pero, ¿cómo consiguen los talibanes esa fortuna?
El narcotráfico como principal fuente de financiación
Afganistán representó aproximadamente el 84% de la producción mundial de opio entre 2015 y 2020, según el Informe Mundial sobre Drogas de 2020 publicado por Naciones Unidas. El cultivo, el procesamiento y la exportación del opio ha podido reportar a los talibanes unos 416 millones de dólares sólo en 2020.
La minería y los impuestos
De las montañas de Agfanistán se extraen muchos minerales, uno de los negocios más lucrativos del país. Desde hace décadas se encuentra bajo control talibán. Los mineros para poder llevar a cabo su labor han de pagar cuantiosas comisiones a los talibanes, algo que los talibanes nunca han ocultado y que les permite recaudar unos 400 millones de dólares al año.
Además los talibanes controlan ciertos impuestos en el país como el "ushr", un impuesto obligatorio sobre la cosecha de un agricultor, o el conocido "zakat", un impuesto del 2,5% sobre el patrimonio.
Financiación exterior
Esta es más difícil de cuantificar. La gran mayoría de esta financiación que podría superar los 250 millones de dólares al año, proceden del Golfo Pérsico, fundaciones opacas y particulares de Arabia Saudira, Pakistán e Iran han aportada tradicionalmente también mucho dinero.
Además se sospecha que los talibanes podrían recibir una cantidad que rondaría los 500 millones de dólares anuales directamente de gobiernos extranjeros, como Rusia, Arabia Saudita, Irán y Pakistán.