viernes. 22.11.2024

En Reino Unido ha cambiado la ley de fertilidad y, es que, las personas que ahora donen esperma, óvulos y embriones para ayudar a otras personas a tener hijos, perderán el derecho al anonimato en el momento en el que nazca el niño, según estos nuevos cambios propuestos en la ley. Posteriormente, en el año 2005 ya se aprobó que los niños concebidos gracias a tejidos de donantes, podían solicitar información a partir de los 18 años para identificar a sus padres biológicos.

 

Por qué cambia la ley

La Autoridad de Embriología y Fertilización Humana (HFEA) ha asegurado que una combinación de pruebas de ADN de fácil acceso, servicios de comparación genética e intercambio de información en las redes sociales lo que permite es que las personas afectadas eviten las rutas formales y rastreen a los donantes de manera independiente.

Según la presidenta del regulador de la fertilidad, Julia Chain, "necesitamos equilibrar la ley con lo que está sucediendo en la realidad".

La ley de fertilidad del Reino Unido fue aprobada hace 33 años y los cambios tienen que ser aceptados por el Parlamento

La ley hasta ahora

La ley original concedía un anonimato total y continuo a todos los donantes de esperma, óvulos y embriones.

Un cambio en la ley, en abril de 2005, entonces permitía a las personas concebidas a través de un donante acceder a la información que le ayudase a identificar a los padres biológicos, al cumplir 18 años.

Este cambio provocó una inicial caída de las donaciones, aunque en los últimos diez años la cifra no hizo más que aumentar.

Actualmente, se usan óvulos y esperma donados en una quinta parte de los ciclos del tratamiento FIV.

"Preparar el futuro"

La última propuesta de cambio en la ley garantiza el anonimato del donante si es antes del año 2005. Además, la intención es exigir a todas las clínicas de fertilidad que comuniquen a los donantes y receptores que la identidad del primero se puede descubrir en centros de pruebas de ADN, y, además, que todos los que se impliquen deben recibir un asesoramiento sobre lo que conlleva la decisión antes de empezar un tratamiento.

También se propone la posibilidad de multar a las clínicas de fertilidad cuya actuación viole las reglas, como hace la Comisión de Calidad de la Atención, pues multar a los hospitales y residencias de ancianos que tienen un mal funcionamiento. 

Otras propuestas del regulador de la fertilidad en Reino Unido, la HFEA, tienen como objetivo "preparar el futuro" de esta ley de fertilidad para asegurar su flexibilidad, y que esté capacitada para cubrir los avances de la ciencia y la tecnología. Muchos científicos ahora están presionando para ampliar la regla "de los 14 días", contemplada en la ley, que le permite a los investigadores estudiar embriones humanos donados en el laboratorio, durante un periodo máximo de 14 días. 

El profesor de ética médica de la Universidad de Lancaster, Dr. John Appleby, dijo que los niños concebidos por donantes y sus familias muchas veces deseaban conocer datos sobre los donantes por muchas y distintas razones, como, por ejemplo, establecer el contacto, o comprender cualquier historial médico que pueda ser relevante. "Tal como está la ley, estos intereses se ven potencialmente frustrados porque la información para identificar al donante se retiene hasta que el niño sea adulto", dijo Appleby. "Si el propósito de eliminar el anonimato de los donantes es promover el bienestar del niño, parece que las recomendaciones que está haciendo la HFEA ayudarían a alinear la ley más con este objetivo".

Ahora solo queda pendiente cómo regular los "modelos" de embriones humanos creados a partir de células madre, y si los genomas de estos embriones se podrían editar para la posible prevención de enfermedades hereditarias.

La ley de fertilidad le quita el anonimato a los donantes en Reino Unido