jueves. 24.04.2025

En un movimiento que podría marcar un antes y un después en la gestión del territorio rural y la conservación de la vida silvestre, el ganadero de Colorado, Pete Gottenborg, ha firmado un acuerdo inédito en el que una organización de conservación ayuda a financiar sus arrendamientos de tierra a cambio de permitir el libre tránsito de alces migratorios por su propiedad.

Este acuerdo, impulsado por el Property and Environment Research Center (PERC) y coordinado con el Colorado Cattlemen’s Agricultural Land Trust, tiene como objetivo armonizar la actividad ganadera con el respeto a los corredores naturales de fauna silvestre. La organización, que surgió durante la Guerra Fría para explorar cómo los incentivos de mercado pueden aplicarse a la conservación, cubrirá hasta dos tercios del costo de los arrendamientos de tierras que los ganaderos suelen negociar con propietarios privados, especialmente en épocas en que el forraje escasea.

La situación no es menor: Gottenborg gestiona Eagle Rock Ranch, una extensión de más de 3.000 acres donde, cada verano, unos 500 alces cruzan su propiedad. Además de destrozar vallas que deben ser reparadas continuamente, estos animales consumen diariamente más de 20 libras de pasto por cabeza, reduciendo considerablemente los recursos para el ganado.

“Yo amo a los alces y no me molesta reparar cercas, pero sin la ayuda económica para alquilar más tierra, no podría permitirme mantenerlos en el rancho sin comprometer el sustento de mis reses”, confesó Gottenborg al Colorado Sun.

La única condición adicional que debe cumplir el ranchero es desmontar sus cercas de alambre de púas cada invierno para evitar que los alces queden atrapados durante su paso. Un gesto simple pero clave que facilita la migración estacional y protege la integridad física de los animales.

El problema de fondo no es nuevo. Durante décadas, la expansión agrícola y ganadera en las praderas de América del Norte ha interrumpido los patrones migratorios ancestrales de muchas especies, particularmente de grandes mamíferos como el alce. Iniciativas como esta representan una vía para reconciliar dos intereses aparentemente opuestos: la producción agropecuaria y la conservación de ecosistemas naturales.

El Land Trust de los Ganaderos de Colorado, que ha protegido más de 800.000 acres de tierras de pastoreo, celebra este acuerdo como una fórmula novedosa y replicable. Aunque el enfoque de mercantilizar ciertos aspectos de la conservación ha sido criticado en algunos círculos, sus defensores argumentan que aplicar principios económicos permite que estas soluciones sean sostenibles en el tiempo.

Con este acuerdo, Gottenborg no solo garantiza el bienestar de sus animales y la sostenibilidad de su rancho, sino que también ofrece un ejemplo de cómo el campo puede convertirse en aliado activo de la biodiversidad. Una solución que combina tradición, naturaleza y mercado en una misma dirección.

Acuerdo pionero en Colorado facilita la migración de alces a través de un rancho