"Son los propios ucranianos quienes deben decidir cuando están dispuestos a sentarse a negociar". Tras estas palabras, el secretario de la OTAN apoyó la idea del director de la Oficina Privada del Secretario General, Stian Jenssen, al plantear una posible solución al conflicto: "Creo que la solución puede ser que Ucrania ceda territorio y reciba a cambio su ingreso en la OTAN. No digo que deba ser así, pero es una posible solución", explicó.
Desde Kiev, catalogaron como "inaceptables" esas declaraciones y mostraron su disconformidad con las hipótesis planteadas por ambos cargos. El propio asesor del jefe de la oficina presidencial, Mykhailo Podolyak, dijo que los comentarios del secretario habían sido "ridículos".
Stoltenberg, también dijo a través de la emisora noruega NRK, que la OTAN quiere conseguir la paz y que "el apoyo militar para Ucrania es la solución". Además añadió que las "grandes potencias" como Rusia, no podían absorber otros países vecinos pequeños así como así.
Ante todo esto, Lituania ya anunció el pasado miércoles la suspensión temporal de las operaciones a lo largo de la frontera del país comandado por el presidente de Bielorrusia, Lukashenko, ante la presencia del Grupo Wagner.