El Papa se ha unido a la "unánime preocupación por la situación en Afganistán" y ha pedido paz y diálogo para el país en un momento en el que los insurgentes talibanes ya han logrado situarse en las puertas de la capital, Kabul, "desde todos los frentes", según ha explicado el ministro del Interior afgano.
"Me uno a la preocupación unánime por la situación en Afganistán y les pido que recen al Dios de la paz para que cese el ruido de las armas y se encuentren soluciones en la mesa de diálogo. Solo entonces la población martirizada podrá regresar a sus hogares", ha señalado el pontífice tras el rezo del ángelus de este domingo.
El Papa ha hecho estas consideraciones poco después de que la jefatura talibán emitiera un comunicado en el que ordenaba a sus fuerzas a "mantenerse en las puertas de Kabul" y "no intentar entrar en la ciudad hasta la conclusión del proceso de transición", según informan los medios internacionales.
El pontífice también ha mostrado su "cercanía" y su "profundo dolor" a la población de Haití tras el terremoto de magnitud 7,2 que sacudió Haití este sábado, 14 de agosto, y que ha provocado centenares de fallecidos, miles heridos y cientos de desaparecidos. Asimismo ha pedido que "hacia ellos se mueva la solidaridad de la comunidad internacional".
