Mensajes Milagrosos volvió a hacer magia este año cuando la organización sin ánimo de lucro ayudó a reunir a un padre y su hijo que llevaban separados más de diez años.
El emocionante reencuentro se produjo después de que Eddie Thompson Ⅲ, que lleva una década luchando contra la inseguridad de la vivienda, pidiera ayuda.
Llevaba años deseando reunirse con su hijo Shay, pero entonces oyó hablar de los voluntarios y el equipo de Mensajes Milagrosos. Están especializados en reunir a familias que se enfrentan a la carga añadida de la falta de vivienda.
Eddie escribió una nota que quería desesperadamente que llegara a su Shay: "Te quiero a muerte y llevo años intentando ponerme en contacto contigo". - Eddie.
En un esfuerzo por reunirlos, la voluntaria Lindsay Pfeiffer se hizo cargo del caso de Eddie y, tras varios días de insistencia, consiguió localizar a Shay e informarle de que su padre lo había estado buscando activamente.
Shay estaba asombrado.
Durante toda su vida adulta había estado buscando a su padre. Llevaban separados desde que Shay se graduó en el instituto. Cada año que pasaba, el joven sentía que la posibilidad de reunirse con su padre se alejaba.
Por arte de magia, Shay descubrió que durante todos los años que había pasado buscando a Eddie, Eddie le había estado buscando a él.
Ambos se reencontraron y tuvieron una segunda oportunidad en su relación, y Shay estaba más que agradecida por haber puesto fin a los años que habían pasado separados.
Tras conocer el paradero de su padre, se sintió como si estuviera en Oprah, porque la experiencia le pareció "demasiado milagrosa para ser real".
Gracias a la coordinación de Lindsay, por fin se conocieron en persona. Eddie no sólo encontró a su hijo, sino que descubrió que también tiene una nieta preciosa.
Ahora, se están poniendo al día de todo el tiempo que se perdieron. Los dos siguen manteniendo su relación y son un testimonio del papel indispensable que desempeñan los Mensajes Milagrosos para volver a unir a las familias.
