Fátima Peláez, una veterinaria de Ceuta, ha salvado a una niña de dos años de sufrir terribles heridas tras ser mordida por un perro. Fátima se encontraba sobre las dos de la tarde en su clínica veterinaria, cuando desde la calle escuchó unos gritos aterradores. Cuando se asomó, vio como un perro de raza American Stafford tenía agarrada entre sus mandíbulas a una niña y la arrastraba por la calle, ante la mirada impotente de su madre.
El resto de los testigos que se encontraba allí también se encontraban en shock, no podían reaccionar ni hacer nada ante tal imprevisto. Pero tras ver lo que estaba sucediendo, Fátima salió corriendo disparada ante el perro y le abrió la boca para evitar que el animal pudiera hacer más daño a la pequeña. "Sé que cualquier persona no hubiera podido reaccionar así porque en esos momentos no hay cordura", explica la veterinaria en el programa Espejo Público de Antena 3.
"Vi que lo que tenía el perro en la boca era una niña y que la estaba zarandeando como a un pelele" relata.
"El perro pesaba unos 40 kilos y la potencia de la mandíbula es bestial. Traté de darle con una zapatilla para ver si llamaba su atención, pero pensé que no lo estaba haciendo bien. Mi reacción fue meterle la mano en la boca, en el maxilar, para abrírsela para que soltara a la niña" explica.
Según relata, la profesionalidad le hizo actuar de esa forma abriendo la boca del can. "No valoré el daño mío ni los posibles ataques hacia mí. Mi prioridad era salvar a la niña" expone.