Alberto Carísimo, es un padre que decidió vender su coche para así poder conseguir dinero para una operación quirúrgica de garganta de su hija de 8 años. En la rifa un señor llamado Gustavo Huerta se hizo con el coche pero decidió devolverle el vehículo a su dueño sin importarle nada.
Gustavo Huerta, abogado de profesión y explicó durante que su única intención al participar en el sorteo era ayudar a Alberto a cubrir la cirugía de su hija. “Casualmente, su hija Susana es la compañerita de mi hijo menor, Alejandro. Ambos están cursando el tercer grado aquí en Santa Rita”, contó a la que procedió a entregarle el vehículo de vuelta al padre. “Alberto, en este acto quiero aprovechar para devolverte este (vehículo) con la llave. Hermano querido, que se recupere tu hija, que salga todo bien en la operación”, contó Gustavo Huerta.
Carísimo no pudo aguantar las lágrimas y le agradeció el gesto a Huerta diciéndole que "Dios te va a devolver el doble".
Alberto era vendedor ambulante y la idea de rifar su coche rondaba en su cabeza. Un día la situación se volvió insostenible y tomó la decisión de rifar su coche ya que así lo requería la situación. Tenía pensado ir en autobús a las consultas de su hija al vender el coche pero al final, gracias a un acto de bondad tan maravilloso como el de Gustavo, Carísimo pudo llevar a su hija de 8 años a su consulta.