El argán proviene de un extracto de semillas del árbol de argán, proveniente de Marruecos. Este árbol tarda décadas en dar fruto y por lo tanto el producto está limitado. Su uso en cosmética sirve a grandes rasgos para aportar hidratación y brillo tanto en uñas, como en la piel y en el cabello.
Gracias a las vitaminas que posee previene el envejecimiento prematuro aporta al pelo una hidratación sorprendente que ayuda a repararlo. Nos viene de perlas para algunos tipos de cabello o problemas en el cuero cabelludo.
Por ejemplo, para el pelo rizado o pelos muy deshidratados y secos irá genial. Al aplicar unas gotas de aceite de argán sobre este tipo de cabellos les aportará la hidratación que necesitan y será más fácil de trabajar y peinar. Si quieres aún más hidratación debes aplicar abundante cantidad del producto por todo el pelo y dejar actuar una hora, habiendo masajeado previamente por el cuero cabelludo. Después, simplemente tenemos que aclararlo como hacemos siempre.
Otro problema que tenemos muchas de nosotras son las puntas abiertas. Esto suele ocurrir porque maltratamos mucho al pelo con diferentes cepillos, planchas, secadores o tenacillas. Sin embargo, al aplicar unas gotas de aceite de argán todos los días en las puntas evitaremos tener que cortarnos el pelo y tendrán un aspecto mucho más sano.
También funcionará genial en la gente que tiene caspa. Pero no cualquier caspa, sino caspa seca. Esto puedo provocar picores en la cabeza y mucha irritación. Con el uso de aceite de argán por el cuero cabelludo, masajeando la zona, todas las noches antes de acostarte las caspa quedará totalmente eliminada.