viernes. 22.11.2024

En abril de 2022, Ángel Torres, originario de Galicia, experimentó un cambio drástico en su vida. "Trabajaba como buzo profesional. Durante una inmersión, perdí mi pierna. Cuando salí del agua, ya no la tenía. El proceso posterior se planteaba difícil, pero me enfoqué mucho en el deporte para tener una recuperación rápida. Era algo que me hacía sentir bien y me beneficiaba mentalmente", recuerda Ángel.

Su pasión por la actividad física era tal que incluso los médicos le reprendieron: "Estuve ingresado un mes y, en la primera semana en el hospital, ya estaba haciendo flexiones en la habitación. Ellos me decían que podría hacerme daño", cuenta entre risas.

Después de salir del hospital, se propuso el desafío de averiguar si podía seguir practicando algunos de los deportes que disfrutaba, como el snowboard. "A los dos meses de aprender a caminar de nuevo, pasé unas pruebas de captación para el equipo de promesas paralímpicas y desde entonces formo parte del equipo. Llevo un año entrenando y compitiendo", explica.

Sin embargo, se encontró con otro obstáculo: "Me resulta difícil hacer snowboard con la prótesis que uso para caminar. No está diseñada para competir y me causa muchas caídas y dolores".

Crowdfunding Por esta razón, decidió iniciar una campaña de crowdfunding para costear una prótesis adecuada para practicar deporte. "En España, la seguridad social no cubre prótesis deportivas, solo las básicas para caminar. La mutua de la empresa donde trabajaba iba a costearla, pero al final no pudo ser. Como ya la había encargado, tuve que buscar una solución porque no disponía del dinero suficiente", explica a Antena 3 Deportes. Hasta el momento, ha logrado adquirir la primera parte de la prótesis, que costó casi 4.000 euros.

Mientras tanto, Ángel sigue entrenando para alcanzar nuevos logros. "Mi objetivo es llegar a los Juegos Paralímpicos de Invierno de 2026. Mientras tanto, intentaré ganar todo lo que pueda", afirma con una sonrisa en el rostro.

Ángel Torres, el snowboarder gallego que necesita una prótesis para competir