La policía ha asegurado que el obispo está acusado de 14 cargos de atentado al pudor y cargos de penetración sexual sin consentimiento, un término legal para referirse a la violación. A sus 74 años, se ha pasado más de 10 cometiendo todo tipo de abusos a niños, de hecho tiene otros tres cargos de “trato indecente con un niño”.
La intervención del propio Vaticano ha permitido que se encarcele a este obispo ya que, la propia Iglesia empezó a investigar al llegarle los primeros casos en 2022. La Iglesia compartió los hallazgos de la policía que finalmente acabó con la detención del hombre.