domingo. 08.09.2024

La vida de María Rubio cambió por completo cuando perdió a sus padres. A pesar de trabajar en Italia como programadora de control numérico y ganar 5.000 euros al mes, decidió dejarlo todo sin importarle para regresar a Almería y dedicarse a lo que siempre había amado: cuidar animales.

Su labor con los animales fue creciendo hasta establecer un resort para perros en Fines, en la provincia de Almería, donde no les falta de nada. "Quiero verlos felices", expresa María, quien ofrece servicios de peluquería canina, una máquina de autolavado y habitaciones individuales para estancias prolongadas.

No obstante, es durante el verano cuando recibe más visitas, gracias a una de las pocas piscinas de agua salada para perros y sus dueños en España. "El cloro no es bueno para los animales", explica María. En total, cuentan con 600 metros cúbicos de agua que abren junto con el restaurante durante esta temporada.

Además del resort canino, el adiestramiento y los servicios, María también lleva a cabo actividades terapéuticas en las que algunos de sus perros visitan a jóvenes con autismo o personas mayores. "A nuestro perro José le encantan los niños y los mayores, y se viven momentos preciosos cuando se juntan", nos explica.

Resort en Almería para que se bañen los perros y sus dueños