Un hombre de Medellín, Colombia, fue ha realizarse una vasectomía ya que no quería tener más hijos debido a los bajos ingresos con los que contaba. Sin embargo, contra todo pronóstico su mujer se quedó embarazada.
La pareja se quedó atónita ante la noticia debido que había sucedido después de haberse realizado la operación. Como solución, decidieron denunciar al doctor que le había operado y a la clínica en general. Además, se enteraron de que el médico no realizó de forma correcta la vasectomia y no se lo comunicó al paciente. Lo que supuso que la pareja no tomara ningún tipo de protección.
"Fruto de esa conclusión inopinada, no recomendó al paciente seguir utilizando métodos anticonceptivos para evitar el riesgo de embarazo. Al quedar probado que los padres no querían procrear más hijos, se concluyó que hubo una afectación a sus proyectos de vida que repercutió en el campo inmaterial (...) especialmente considerando la precaria situación económica del padre, quien actualmente no puede trabajar debido a sus problemas de salud", comunica el juez en el auto emitido tras el juicio.
Según han informado medios locales, tras varios meses de trámites y juicios, el magistrado declaró que la clínica deberá mantener al bebé hasta que cumpla los 18 años. En concreto, tendrán que pagar a la pareja 80 salarios mínimos, es decir, 92 millones de pesos, unos 187.000 euros. A esto también se le suma unos 60 millones de pesos, unos 12.000 euros, de la demanda y 143 millones de pesos, unos 23.000 euros, por la manutención. En líneas generales, unos 60.000 euros en total.