jueves. 21.11.2024

Un reciente estudio arroja luz sobre la posibilidad de que los audífonos no solo mejoren la audición, sino que también puedan contribuir a una vida más larga, reduciendo el riesgo de mortalidad en casi un 25 por ciento.

La pérdida de audición es una realidad para millones de personas en todo el mundo, aunque solo uno de cada diez que la necesita opta por usar audífonos.

Para aquellos que dudan en seguir el consejo médico de utilizar audífonos, un equipo de científicos de la Universidad del Sur de California tiene un mensaje para el Año Nuevo, según su reciente estudio publicado en la revista The Lancet Healthy Longevity.

La Dra. Janet Choi, líder de la investigación, señaló: "Descubrimos que los adultos con pérdida de audición que usaban regularmente audífonos tenían un 24 por ciento menos de riesgo de mortalidad que aquellos que nunca los usaban. Estos resultados son emocionantes, sugiriendo que los audífonos pueden desempeñar un papel protector en la salud y prevenir la muerte prematura".

Aunque investigaciones anteriores han vinculado la pérdida de audición no tratada con una esperanza de vida reducida, así como niveles más altos de depresión y demencia, el impacto del uso de audífonos en la mortalidad no se había explorado en profundidad.

El nuevo estudio, dirigido por la Dra. Choi, una otorrinolaringóloga de la Facultad de Medicina Keck de la USC, representa el análisis más completo hasta la fecha sobre la conexión entre el uso de audífonos y la mortalidad.

El equipo utilizó datos de una encuesta nacional de 2012 para identificar a casi 10,000 adultos de 20 años o más que se sometieron a evaluaciones de audiometría y completaron cuestionarios sobre el uso de audífonos. El estado de mortalidad de los participantes se siguió durante 10 años después de las evaluaciones.

De los 1,863 adultos identificados con pérdida de audición, 237 eran usuarios regulares de audífonos, utilizando los dispositivos al menos una vez a la semana, cinco horas a la semana o la mitad del tiempo. Otros 1,483 fueron clasificados como 'no usuarios' regulares. Aquellos que usaron los audífonos menos de una vez al mes se catalogaron como 'no usuarios regulares'.

Los resultados revelaron que la diferencia del casi 25% en el riesgo de mortalidad entre los usuarios regulares y los no usuarios se mantuvo constante, independientemente de variables como el grado de pérdida de audición, edad, etnia, ingresos, educación y antecedentes médicos.

No se observó ninguna diferencia en el riesgo de mortalidad entre los usuarios no regulares y los no usuarios, lo que sugiere que el uso ocasional de audífonos puede no aportar beneficios para prolongar la vida.

Aunque el estudio no profundizó en los motivos por los cuales los audífonos pueden estar vinculados a una vida más larga, la Dra. Choi señaló investigaciones recientes que sugieren una relación entre el uso de audífonos y niveles más bajos de depresión y demencia.

La Dra. Choi, quien nació con pérdida de audición en el oído izquierdo y no utilizó un dispositivo auditivo hasta los 30 años, espera que este estudio aliente a las personas a superar barreras como el estigma y el costo asociados con los audífonos.

Además, Choi está trabajando en una base de datos basada en inteligencia artificial que clasifica las opciones de audífonos y las adapta a las necesidades individuales de cada paciente.

Estudios demuestran que los audífonos podría reducir el riesgo de muerte un 24%