sábado. 23.11.2024

Un matrimonio catalán ha sido protagonista de un precioso hecho después de su fallecimiento. Y es que Joan Bonada y Núria Enrich era una pareja de catalanes que consiguieron ganar mucho dinero gracias a la creación de un importante negocio de imprenta en Venezuela, el cual actualmente sigue en funcionamiento. La pareja decidió dejar siete millones de euros como herencia al Hospital de la Cerdanya y a una residencia de ancianos de Puigcerdá (Girona), como última buena acción.

El matrimonio se conoció en Venezuela y nunca tuvo hijos. Ambos decidieron volver a España para pasar sus últimos años en Puigcerdá, tal y como relata TV3. Allí redactaron en su testamento que un 75% de su patrimonio estaba destinado a ayudar a los demás: cuatro millones de euros para dicho hospital y tres millones para la residencia de ancianos.

Esta herencia se hizo efectiva, después de que Bonada falleciese lamentablemente debido al Covid-19, hace dos años, y de que Enrich falleciese el pasado mes de agosto.

"Persona con visión para los negocios"

Esta pareja se conoció en Venezuela. Joan Bonada, que era el menor de nueve hermanos, decidió emigrar a Sudamérica durante la posguerra, viendo la miseria que se estaba impregnando en su tierra. En Venezuela ya estaba viviendo Núria Enrich, también catalana. Ambos decidieron crear la imprenta que les ha permitido ganar importantes cantidades de dinero gracias a su éxito.

Los sobrinos del fallecido Bonada lo definieron como  "un hombre hecho a sí mismo", según cuenta la cadena catalana. "Era una persona con visión para los negocios, capaz de verlos incluso antes de que surgiesen", ha afirmado Antonio Bonada.

Matrimonio catalán deja como herencia 7 millones de euros a un hospital y una...