Roberto, tras pasar las semanas más duras de su vida, quiso agradecer en una emotiva carta, al hospital que había luchado por mantener con vida a su madre, el Hospital Universitario Torrecárdenas de Almería. En la carta quiso agradecer a todo el equipo médico su trato hacia él y su madre en sus últimos días. "Lo menos que puedo hacer es agradecer de corazón a todos y cada uno de los miembros de la Unidad de Cuidados Paliativos la forman en la que nos han tratado", escribe en la carta, "sobre todo a mi madre".
El hijo de Purificación describe en el emotivo texto la unidad en la que madre e hijo pasaron las tres semanas como "una isla dentro del Hospital", una isla donde "ya no se trata de curar sino de cuidar, de comprender y acompañar al paciente y sus familiares en un momento delicado de sus vidas".
Esta bonita carta ha sido publicada en redes sociales por el propio Hospital Universitario de Torrecárdenas. Una carta donde se agradece uno por uno a todo el personal sanitario que estuvo presente en los últimos días de vida de su madre. Aunque no debería centrarse en nadie, el escrito del joven recuerda al atento doctor Cristóbal Urrea "que nos atendió en todo momento" o de Sergio y Alejandro, el psicólogo que estuvo con la familia durante el proceso.
✍🏽 Gracias a ti, Roberto, por dedicarnos estas palabras tan bonitas en momentos tan duros como los que estáis viviendo la familia. Os acompañamos en el sentimiento. Un fuerte abrazo. @CruzRojaAlmeria pic.twitter.com/FkTDzhkRt9
— Hospital Universitario Torrecárdenas (@TorrecardenasHU) September 30, 2022
En la carta hay agradecimientos para todos, hasta para el cuidadoso personal de cocina que "cuatro veces cada día traía la comida". Limpiadoras, celadores, auxiliares de clínica, personal de enfermería, todos dieron el máximo en su trabajo para, como describe el hijo de Purificación: Lo hacen de la mejor manera que saben y pueden, sin conocer al paciente, sin que haya vínculos familiares, los tratan con el mimo y el cariño que supera con creces la cuantía en su nómina".
Unas semanas con un final amargo, con la muerte de Purificación, pero que sirvieron para destacar la humanidad, un valor que en esta sociedad tan mecanizada se echa de menos a veces. "Por cada uno de esos pequeños detalles que marcan la diferencia", acaba diciendo, "muchas gracias".